lunes, 24 de agosto de 2009

MARY TIFOIDEA

Hola, amigos:

Hoy día estamos acostumbrados a oir que tal o cual persona es portadora de un virus pero no sufre la enfermedad, como pasa con el SIDA, pero en el siglo XIX esta circunstancia era absolutamente desconocida. Aquí teneis la curiosa historia de Mary Mallon, la primera persona que fue documentada como portadora sana de un virus mortal.

Mary nació el 23 de septiembre de 1869 en County Tyrone (Irlanda). Su madre contrajo la fiebre tifoidea (tifus) durante el embarazo, ya que en aquella época había una epidemia terrible en la isla, y eso provocó que naciese con el virus en su organismo, pero sin estar afectada, algo que nadie sabía que podía pasar.

Desde muy pequeña se tuvo que poner a trabajar. Se ganaba la vida como podía, vendiendo mejillones y ostras por las calles de Dublín cuando el marisco era comida de pobres, hasta que una paisana que había emigrado a Nueva York le habló de la tierra de las oportunidades, lejos de un pais asolado por la pobreza y el tifus. Invirtió sus ahorros en un pasaje y emigró, llegando a La Gran Manzana en el año 1900.

Allí se dedicó a cocinar y a vender pasteles y budines en la calle, hasta que encontró trabajo como cocinera en casa de una familia emigrante, los Mamaroneck. A las dos semanas, toda la familia y todo el servicio, salvo ella, estaban infectados de tifus.

En 1901 volvió a entrar al servicio de una familia y de nuevo todo el personal salvo ella desarrolló la enfermedad, muriendo una sirvienta. Después se fue a casa de un abogado y siete de los ocho miembros de la familia se infectaron. Ignorante de ser la causa de la epidemia, Mary pasó meses ayudando en la atención a las personas enfermas, pero su cuidado contribuía a una mayor propagación de la enfermedad.

En 1906, se trasladó a Long Island con otra familia. Pasadas dos semanas, seis de los once miembros fueron hospitalizados. Las autoridades médicas se dieron cuenta de que algo raro pasaba y le pidieron que se sometiese a diferentes análisis, a lo que se negó sistemáticamente, alegando un pánico terrible a los médicos y las agujas.

A continuación cambió de empleo tres veces y los tres hogares se vieron infectados, así que fue arrestada por la policía. Desde ese momento, Mary Mallon fue conocida como “Mary Tifoidea” (“Typhoid Mary”). Se trataba de la primera persona en ser identificada como portadora sana de tifus en los Estados Unidos. Durante el desarrollo de su caso, adquirió una fama enorme por su obstinación en negar que ella fuera la causante de la aparición de la enfermedad, insistiendo en seguir trabajando como cocinera y propagando así la fiebre mortal, ya que el tifus se contagia por la ingestión de agua o alimentos contaminados.

Mary Mallon fue puesta en cuarentena durante tres años en un hospital ubicado en la isla de North Brother. No consiguieron encontrar una cura y pasado este tiempo la dejaron en libertad, con la condición de que no volviera a trabajar con alimentos. A la izquierda la vemos durante su internamiento.

Pero Mary cambió su apellido de Mallon a Brown y consiguió empleo como cocinera en el Hospital Sloane para Mujeres. Después de matar 2 pacientes e infectar a 25 fue localizada por la policía y la arrestaron de nuevo. Esta vez estamos hablando de un homicidio, porque Mary debía ser consciente de que era portadora de la enfermedad y podía contagiarla. Su respuesta fue que eso no le importaba en absoluto, que no lo creía y que necesitaba trabajar.

Debido a la gran cantidad de muertes que acumulaba y a su empeño en negar lo evidente, las autoridades no le dieron opción. Regresó a su cuarentena en la isla, esta vez de por vida.

Mary acabó trabajando en el hospital donde estaba recluida, primero como asistente y luego como técnica de laboratorio. Allí, “Mary Tifoidea” se convirtió en una celebridad. Los periodistas que la entrevistaban tenían prohibido aceptar incluso un vaso de agua ofrecido por ella. A la derecha la vemos junto a un médico.

Mary Mallon falleció el 11 de noviembre de 1938 a los sesenta y nueve años, debido a una neumonía, seis años después de un derrame cerebral que la dejó paralizada. En los resultados de su autopsia se especificó el hallazgo de bacterias tifoideas vivas en su vesícula biliar. Su cadáver fue incinerado y sus cenizas enterradas en el cementerio de Saint Raymond, en el Bronx.

Hoy día, el término "Mary Tifoidea" aún se utiliza en Estados Unidos cuando se habla de alguien portador de alguna enfermedad que representa un peligro para la gente porque rechaza tomar las precauciones necesarias.

Lo que mas llama la atención de Mary Mallon fue su negativa a aceptar lo evidente y dejar de cocinar. Cualquier ocupación que no requiriese manipulacion de bebida y alimentos le hubiese permitido vivir en libertad, pero su obsesión la convirtió en una extraña asesina, que causó más víctimas que muchos asesinos en serie.

Besos a tod@s


2 comentarios:

Anónimo dijo...

... ufff¡ menos mal que este post no se lo has dedicado a nadie!!...

Lucre

Anónimo dijo...

Que cabrona la tia no? :-S