miércoles, 28 de enero de 2009

CASUALIDAD----- rectificado de errores


Hola, amigos:

Gracias a un comentario anónimo me he dado cuenta que hay errores en el post. Lo siento, eso me pasa por ir con prisas y no comprobar lo que publico. Rectifico, que es de sabios, pero sigo agradeciendo la colaboración, porque aunque sea bastante inexacta es una muestra de consideración y cariño hacia este bloguero.

En negrita, al lado de cada comentario, están las rectificaciones.

He conocido al teniente Caine, de C.S.I. Miami. Me ha mandado un e-mail, sugiriéndome el tema de este post.

Me ha sorprendido que su segundo apellido sea Flores, porque con la pinta de guiri que se gasta hubiese jurado que debería ser Flowers, y su dirección de e-mail coincide con los nombres de dos grandes amigos míos pero... prefiero pensar que el mismísimo Horacio Caine me ha escrito.

Su correo habla de las casualidades que se dan en las vidas de dos presidentes de Estados Unidos, Lincoln y Kennedy, y aunque soy por naturaleza reacio a explicaciones paranormales es para pensárselo. Aquí lo pongo. Doy las gracias públicamente y os pido que sigais sugiriendo cosas, que poco a poco este blog está siendo mas nuestro y menos mío.

Lincoln nació en 1846 (error, 1809), Kennedy en 1946 (error, 1917). 100 años de diferencia (error, 108 años de diferencia). Es posible que la fuente inicial se refiera a las fechas en que son elegidos congresistas, 1847 y 1946, respectivamente, en vez de al nacimiento.

Lincoln fue elegido presidente en 1860, Kennedy en 1960 (error, 1961). 100 años de diferencia (error, 101 años de diferencia).

John Wilkes Booth, el asesino de Lincoln, nació en 1839. (error, nació en 1838) Lee Harvey Oswald, asesino de Kennedy, nació en 1939. 100 años de diferencia (error, 101 años de diferencia).

Los dos asesinos eran conocidos por sus 3 nombres completos, algo inusual en la cultura americana, que tiende a poner solo la inicial del segundo nombre.

Los dos asesinos murieron a tiros antes de sus respectivos juicios.

Los dos presidentes fueron asesinados un viernes. (error. Lincoln murió un viernes, Kennedy murió un miércoles)

Los dos murieron de un tiro en la cabeza.

Los dos fueron reemplazados por sus respectivos vicepresidentes, y ambos se apellidaban Johnson.

Los dos perdieron un hijo cuando ocuparon la Casa Blanca. (Sin poder confirmar)

La secretaria de Lincoln se apellidaba Kennedy. La de Kennedy se apellidaba Lincoln. (sin poder confirmar)

A Lincoln lo mataron en el Teatro Ford, a Kennedy en un coche marca Ford, modelo Lincoln.

Una semana antes de morir, Lincoln estuvo en Monroe, Maryland. Una semana antes de morir, Kennedy estuvo con Marilyn Monroe. (sin confirmar)

Para pensárselo, amigos. Un día de estos pondré las semejanzas que se dan en el trío Nacho Vidal / Brad Pitt / yo.

Aunque me temo que será el post mas corto de la historia.

Besos a tod@s.

P.D.: el post sería corto porque los otros no están a mi altura... que lo sepais. (Esto es completamente exacto)


martes, 27 de enero de 2009

EL MAS SINVERGÜENZA

Hola, amigos:

No.

No hablo de mí.

De verdad.

Hoy vamos a hablar de alguien como El Dioni, como Jesús Gil, como Milli Vanilli, pero con tal clase y elegancia a la hora de estafar que fue capaz de cosas como levantarle 5000 dólares al mismísimo Al Capone o vender la Torre Eiffel. Dos veces.

Con dos cojones. ¿Os lo presento?

Nuestro amigo se llamaba Víctor Lustig y nació en 1890 en Czechoslovakia. Nada se conoce de su infancia, pero desde muy joven demostró gran talento para el póker, el billar y el bridge, así que se dedicó a cruzar de un lado a otro el Atlántico, viviendo de las trampas que hacía en las timbas de cartas de la primera clase.

En 1922 decide que ya está bien de cruceros, no sea que le pase como a los pasajeros del Titanic, y llega a Estados Unidos dispuesto a probar fortuna, donde consigue estafar 23000 dólares a un banco.

En mayo de 1925 Lustig viaja a París y lee en el periódico un artículo donde se decía que la Torre Eiffel necesitaba reparaciones muy extensas. El costo era tan enorme que se especulaba con que el gobierno estaba pensando si no sería mas conveniente desmantelarla antes que gastar tanto dinero en repararla. Al fin y al cabo, se edificó pensando en desmontarla al término de la Exposición Universal de 1889.

Víctor falsifica unos papeles que lo acreditan como Director General del Ministerio De Correos y Telégrafos del gobierno francés y envía misivas de apariencia oficial a cinco de las industrias metalúrgicas más importantes de Francia, citándolos para una conferencia privada en la suite de un hotel distinguido en París.

Las cartas eran deliberadamente vagas, para picar la curiosidad de las potenciales víctimas, y solo se mencionaba que el propósito de la reunión era discutir la probabilidad de un contrato con el gobierno.

El día de la cita, Lustig les anuncia la verdadera naturaleza de la pequeña conferencia: el gobierno ha decidido desmantelar la torre Eiffel y vender los materiales al mejor postor. El gobierno sabía que esta decisión era muy controvertida, puesto que muchos ciudadanos franceses se encontraban encariñados con ella y si supiesen del plan de desmantelamiento, podría haber problemas. Era necesario guardar la más estricta confidencialidad.

Cuatro días después, los industriales sometieron su oferta para comprar la torre. Pero a Lustig no le importaba qué oferta era la mas grande. A él lo que le importaba era cual de los industriales era el mas "estafable." La afortunada víctima fue un señor llamado Andre Poisson. Víctor llama al industrial y le anuncia la feliz noticia: su empresa ha ganado la licitación, pero hay un pequeño fleco que cerrar.

Nuestro amigo le pasa a relatar las enormes privaciones que un servidor del gobierno sufre a causa de las limitaciones de salario. Poisson se da cuenta de que el representante oficial le pide un soborno y manda buscar un buen fajo de billetes, que Lustig se guarda mientras firma un contrato de aceptación de la oferta. Le dice que en breve se pondrán en contacto con él para perfilar detalles y se marcha de inmediato a Viena con la recompensa a sus esfuerzos.

Todos los días revisa los periódicos para ver si Poisson ha ido a la policía con el cuento de la estafa pero tal como había calculado, el empresario no lo había denunciado, avergonzado de haber caído en una trampa tan burda.

Cuando estuvo seguro de que la estafa quedaría impune, decide ir a París de nuevo, cita a cinco industriales diferentes... y vende la torre Eiffel otra vez.

Pero en esta ocasión la suerte no le acompañó, puesto que su nueva víctima sí que fue a la policía, estallando un escándalo de proporciones épicas en la prensa francesa. Lustig huye a los Estados Unidos.

Allí se asocia con un tal William Watts, un falsificador de billetes, pero son atrapados por el Departamento Federal de Falsificaciones. Víctor se declara culpable y es sentenciado a veinticinco años de prisión en Alcatraz, donde conoce a Al Capone.

El mafioso vivía a cuerpo de rey en la prisión, llevando sus negocios casi como si estuviese en la calle. Un día, Victor le propone un negocio seguro para el que necesita 40.000$. El mafioso le advierte de lo que puede pasar si la pasta desaparece pero nuestro amigo lo tranquiliza.

Guarda el dinero durante dos meses sin tocarlo. Luego le dice a Capone que el negocio no era tan seguro como pensaba y él es muy escrupuloso con el dinero ajeno como para arriesgarlo, así que se lo devolvía íntegro. El mafioso, impresionado por la aparente honradez, lo gratifica con 5000$ , lo introduce en su círculo en la prisión y le facilita los lujos de los que disfrutaba.

El nueve de marzo de 1947 contrae neumonía y muere treinta y seis horas mas tarde a los cincuenta y siete años de edad.

En su certificado de defunción, en la casilla donde se pone la profesión del individuo, el forense puso... "vendedor".

Besos a tod@s


viernes, 23 de enero de 2009

LA MAYOR VERGÜENZA DEL MUNDO

Hola, amigos:

En primer lugar debo daros las gracias. He mirado el número de visitas que tiene el blog desde que se creó y salen más de 800 en el momento que escribo estas líneas. Esperaba que solo hubiesen entrado cuatro o cinco gatos, los que siempre me comentan las cosas, y resulta que hay muchos más. Gracias a todos.

Ahora vamos con una historia desconocida para muchos de vosotros, a la altura de las mas sórdidas y ridículas que me hayan pasado nunca. Va por Yoli, una de las pocas personas que conoce la historia, aunque dudo que me lea.

Una vez tuve una novia la mar de creativa. Por culpa de su creatividad y mi especial suerte me pasaron cosas que incluso en este blog serían inconfesables. Cuando acabó la relación pensaba que nunca volvería a encontrar a nadie como ella y aunque así fue, nunca supuse que su recuerdo volvería a mi mente tan pronto, concretamente a las pocas semanas de estar con otra chica.

Soy extremadamente juguetón en la cama y me gusta hacer apuestas continuamente, del tipo "si gano, te quedas quietecita y hago contigo lo que me dé la gana; si pierdo, el que se queda quietecito soy yo...".

El caso es que cuando perdí mi primera apuesta no pude quedarme quieto precisamente y medio en broma, medio en serio, me gané una amonestación.

Pero mira que eres sinvergüenza.

Es que me puede la sangre, niña.

Si, si, la sangre. La próxima vez te amarro a la cama.

Vale, vale. Me quedo quieto la próxima vez.

Pero terminó siendo una mentira grande, como Falete, así que tenía que redimirme y decidí hacerlo como Dios manda. Me fuí al sex-shop más famoso de Sevilla, entré, ví a un pedazo de mujer detrás del mostrador, me fuí hacia ella y le pregunté:

¿Tiene unas buenas esposas ?

Claro, cariño - voz profunda, grave, de llamarse Manolo, con un agujero solo... virgen santa - acolchadas, de bondage, de las que hacen daño... ¿qué prefieres?

Pues que no haga daño, si es posible. Es solo para quedarme quieto.

Mmm... hay muchas formas de quedarse quieto, si quieres te comento alguna, cariño.

Mire, mejor no. Deme las esposas, que lo tengo claro.

Y allá que me fuí con mi paquetito bien sujeto, y me refiero al paquetito de las esposas. Llamé a mi chica:

Tengo una sorpresa para ti...

Ah, ¿si?

Si. Nos vemos a las siete en mi casa. ¿Te parece?

Vale.

Y a las siete menos cinco ya estaba asomado a la ventana para verla llegar. Vivo en un 4º piso sin ascensor, así que cuando la ví entrar en el portal sabía que pasarían unos minutos mientras llegaba a casa. Pero apenas había subido un par de escalones cuando la llamó su hermana.

El coche me ha dejado tirada, ¿puedes venir por mí?

Pues claro, ahora mismo. Llamo a Miguel y le digo que nos vemos mas tarde, así no subo los cuatro pisos.

Me llama al móvil y yo no le contesto. Como piensa que estoy en la ducha o en el baño me manda un mensajito donde me dice que me llamará cuando pueda. Y se va.

Y yo no puedo coger el móvil ni contestar porque ya estoy encadenado a la cama, en pelotas, con las llaves encima de la mesita de noche, totalmente fuera de mi alcance.

Cuando pasan los minutos comienzo a pensar que algo ha pasado y como todos los hombres me pongo en lo peor: que ha muerto en las escaleras, y que luego moriré yo, de sed, de hambre o devorado por las hormigas. Dos horas mas tarde apareció en casa, toda preocupada porque no cogía mi móvil, porque no contestaba a los mensajes, porque podía pasarme algo. Y me encuentra con las piernas cruzadas porque me hago pipí, llorando mientras espero la muerte, desnudo, esposado...

Nunca en mi vida se han reido tanto de mí.

Nunca en mi vida estuve ni he vuelto a estar tan abochornado.

Besos a to@s


miércoles, 21 de enero de 2009

ANNE BONNY. La pirata bisexual.

Hola, amigos:

Hace algún tiempo, a petición de Patri, me sumergí en el mundo de los piratas españoles. Lo cierto es que la historia más interesante era la de Don Pedro Niño (pulsar en el nombre para ver el post) pero también encontré varias mujeres piratas. No se habla demasiado de ellas pero hubo muchas, y en algunas ocasiones con un éxito considerable, como el caso de la china Ching Shih en el siglo XIX, que llegó a tener una flota de 500 barcos y terminó sus días casada con un gobernador. Pero hoy nos ocuparemos de Anne Bonny, porque además de pirata era bisexual y es el primer caso documentado de mujer que forma un trío. Vamos allá.

Nació mas o menos en 1700, no está muy claro, hija del abogado William Cormac y la criada de su esposa. El padre tuvo que emigrar a causa del adulterio, llevándose a la pequeña y a su madre biológica a Charleston, en Carolina del Sur. Allí amasó una fortuna invirtiendo en distintos tipos de plantaciones. La habilidad de su padre con los negocios permitió a Anne Bonny vivir una adolescencia alejada de la pobreza y obtener un buen nivel educativo.

En aquella época el papel de la mujer se reducía a procrear y cuidar de la familia, pero este modelo de vida no agradaba a la futura pirata. Anne tenía un carácter fuerte que a veces se tornaba violento: a los 13 años fué acusada de agredir con un cuchillo a otra joven. Cegada por la idea romántica que tenía de los bucaneros, al cumplir dieciséis años de edad se enamoró locamente de un marinero de medio pelo llamado James Bonny, que había flirteado con la piratería. Tras casarse con la joven el marinero ambicionó apropiarse de la fortuna del padre. Pero Cormac, que no tenía un pelo de tonto, desheredó a su hija para hacer fracasar los planes de Bonny.

Anne no se tomó muy bien el asunto. En un ataque de rabia incendió una de las propiedades de su padre y se fueron a probar fortuna en New Providence (actualmente Nassau), en las Bahamas, donde la suerte sonrió a James al entrar a formar parte del servicio del gobernador de la isla, Woodes Rogers, en calidad de informador.

Anne Bonny se hizo muy pronto célebre en la isla. Tenía un carácter arrollador, sus modales eran tan vulgares como los de cualquier pirata y además era atractiva. Todo esto, unido al hecho de que su marido pasada largas temporadas fuera de casa a consecuencia de su empleo, provocó que fuera cortejada con frecuencia y que tuviera numerosos escarceos amorosos.

Un día conoció a Chidley Bayard, uno de los hombres más ricos del Caribe, que viajaba en compañía de su amante, María Vargas, una española de dudosa reputación y de carácter violento. Anne se encaprichó del millonario y retó a un duelo a muerte a la Vargas, del que salió victoriosa. Tras ello, viajó asiduamente con su nuevo amante y disfrutó algunos meses gastando su dinero y gozando de un alto nivel de vida que le resultaba más que agradable.

Pero sus aventuras con Bayard terminaron pronto. Fueron invitados a una fiesta en la mansión del gobernador de Jamaica. La hermana de éste se mofó de Anne Bonny, acusándola de ser una prostituta a sueldo del millonario, y nuestra amiga respondió a la ofensa atizándole en toda la boca con un tablón de madera, haciéndole perder varios dientes. Chidley Bayard usó su influencia con el gobernador para evitar la detención de la chica, pero tras estos hechos decidió separarse de ella por considerarla una fuente de problemas.

Anne volvió a New Providence y continuó con sus conquistas. Fue entonces cuando conoció al pirata Jack Rackham, también conocido como "Calico Jack" de quien se enamoró perdidamente. Rackham era un joven notablemente atractivo y su temperamento coincidía con el de Anne.

"Calico" Jack quiso aprovechar el año de Amnistía extraordinario que brindaba el gobernador para la piratería, decidió embarcarse en la tripulación del navío "Venganza", propiedad del capitán Charles Vane y Anne se empeñó en acompañarlo. Como se creía que la presencia femenina en un barco era signo de mal agüero, tuvo que vestirse de hombre para poder subir a bordo. Durante aquel año viajaron en la tripulación dando pequeños golpes, pero la desgracia llegó cuando Anne se quedó embarazada y acabó abortando de forma natural, decidiendo ambos volver a New Providence.

A su vuelta, Anne supo que su marido era consciente de su engaño con Jack y que había denunciado el caso ante la gobernación. Pero gracias a los contactos y amistades que tenía en la isla llegaron a sus oídos los rumores de un complot contra la vida del gobernador. No dudó entonces en avisar de tales planes al mismo, con lo que se ganó su favor. Así, al volver de alta mar su marido, el gobernador fue indulgente con el adulterio de Anne, sugiriendo a "Calico" Jack que pagase una cantidad de dinero al marido por el divorcio con la chica.

James se negó a aceptar el acuerdo y la pareja, antes de que el gobernador cambiase de opinión, decidió reunir una tripulación, robar un barco en el puerto y partir a alta mar, reanudando así su carrera en la piratería, pero esta vez al mando de su propio barco.

La piratería resultó provechosa y los golpes continuos. Al poco tiempo, Jack y Anne capturaron un barco alemán, donde un joven extremadamente delicado y bello llamó la atención de Anne. Jack, receloso de la relación más allá de la amistad entre Anne y el joven, pidió explicaciones y descubrió entonces que tal joven no era sino otra mujer que se había vestido de hombre. Eso cambió las cosas, y al parecer se inició un curioso triangulo amoroso entre los tres. Esa otra mujer pasaría también a la historia de la piratería como Mary Read.

Con Mary como nueva compañera la fortuna siguió sonriendo a la pareja. Ambas mujeres peleaban igual o mejor que cualquier hombre y no hubo problemas con el resto de tripulantes. A pesar de que el tiempo pasó y fueron muchas las aventuras con desenlaces victoriosos, en 1720, un navío dirigido por el comandante Jonathan Barnet, a las órdenes del gobernador de Jamaica, puso fin a sus días de piratería.

Barnet tuvo la suerte de encontrarse con la mayoría de los tripulantes borrachos como cubas tras una captura y apenas opusieron resistencia. De hecho, la leyenda cuenta que precisamente fueron las dos mujeres las últimas en caer y quienes permanecieron en cubierta luchando como diablos hasta que fueron capturadas por la fuerza.

El juicio que se celebró en las semanas próximas tuvo eco y repercusión en todo el Caribe. Además hizo historia, pues los informes redactados al respecto pasaron a ser el primer documento escrito que habla sobre la existencia real de mujeres a bordo de un barco pirata. Poco después se descubriría que las dos mujeres estaban embarazadas, lo que les libró de la pena de muerte, mientras que Jack Rackham y el resto de la tripulación masculina fueron condenados a la horca.

A Anne, a pesar de su condición de prisionera, se le permitió hablar con Jack antes de que fuese ejecutado, y las únicas palabras que la muchacha le dirigió entonces fueron:

Si hubieras peleado como un hombre, no tendrías que morir ahora como un perro.

Toma delicadeza.

Al poco tiempo, Mary Read cayó enferma en su celda y la fiebre acabó con su vida antes que pudiese dar a luz a la criatura que habitaba en su seno.

Anne Bonny tuvo mejor suerte. La noticia de su captura dio la vuelta al mundo y llegó hasta los oídos de su padre y a un procurador enamorado, a quien Anne había salvado la vida al liberarlo tras la captura de su barco, que intercedieron para adquirir su libertad económicamente.

Tras su liberación se pierde el rastro histórico de Anne Bonny, quien entonces contaba con apenas 20 años y dio a luz a su hijo en libertad. Existen sin embargo teorías que apuntan a que tras ser liberada pudo casarse con el mismo procurador que ayudó a pagar su libertad, pues su marido James Bonny murió en esa misma época, ahogado por un terrible huracán que azotó las Bahamas, dejando a la joven viuda y libre para volver a casarse.

Besos a tod@s



lunes, 19 de enero de 2009

EL DIA DE LA NIEVE

Hola, amigos:

De acuerdo. Me lo he buscado. He pedido sugerencias y me las habéis hecho. Debo contar más historias personales. Ya tengo publicados varios momentos de los que marcan el carácter y el devenir de un hombre: mi primera vez, donde cuento mi primer beso, no hay nada peor que..., donde cuento mi operación de fimosis, y mis momentos de vicisitud, donde cuento mi primer orgasmo. Vamos con la tercera, donde vamos a hablar de un suceso terrible, que por poco nos cuesta una pulmonía a un amigo y a mí.

Este post se lo dedico a Javi, que tuvo la desgracia de vivir conmigo aquella circunstancia.

Javi, vámonos en Semana Santa a Madrid.

Vale.

Así comenzaba todo. No recuerdo el año concreto, pero hizo frío polar en la península durante todo el invierno, y la primavera asomaba tímidamente a principios de Marzo.

¿No hará mucho frío?

No, Javi, como mucho 3-4 grados menos que en Sevilla.

Hacia finales de ese mes, en Sevilla estábamos a 20ºC y al llegar Semana Santa agarramos el Citröen AX y nos fuimos a los madriles. En cuanto llegamos nos dimos cuenta de que había un fallo. Faltaba algo. Concretamente el segundo dígito del termómetro del coche, porque no podíamos estar a 3ºC, debíamos estar a 13.

Pero no era un error. Un último frente polar había llegado, era la Semana Santa más fría en Madrid de los últimos veinte años y llevábamos camisas de manga larga como máximo abrigo, así que nos pusimos toda la ropa encima, cambiando cada día la última camisa para que no pareciese que siempre llevábamos la misma.

A pesar de no utilizar la vergüenza con demasiada frecuencia, hay un momento íntimo donde necesito el máximo de complicidad y confianza, y por lo tanto debo estar en un entorno absolutamente conocido: cuando pongo una caquita. Tiene que ser en mi water. En mi casa. Cuando me voy de viaje puedo estar perfectamente 4 o 5 días sin deponer, para pasar a tener ganas cuando regreso, cuando estoy a 2 km de mi casa y luego he de subir las escaleras con la tortuguita asomando y mas prisa que un mariquita en una rebaja de tangas.

El caso es que el tercer día de viaje tenía almacenado en el cuerpo bocatas de calamares, mollejas, oreja, cochinillo, unos cuantos litros de cerveza, otros cuantos de cubata... Y en la subida hacia El Escorial se precipitaron los acontecimientos.

Comenzó a nevar. No teníamos cadenas, no teníamos abrigo. No podíamos parar hasta llegar al Escorial por si cortaban la carretera.

Me incliné hacia adelante para limpiar un poco el parabrisas.

El cinturón de seguridad comprimió un poquito mi estómago.

Se me escapó un pedete.

Y sumando el pedo y la calefacción, supe al instante que debía prevenir a mi amigo.

Javi, tengo algo que decirte...

Pero no me dio tiempo. El pedo fue mas rápido. Se apoderó del coche como si tuviese vida propia y proclamó su dominio como los lobos: por el olor y provocando aullidos, en este caso de mi amigo Javi.

¡Me cago en la madre que te parió! ¡Estás podrido, caaabrón!

Tranquilo, que abro mi ventanilla y enseguida se va...

Un carajo. Se quedó.

Tranquilo, abre también tu ventanilla que así seguro que se va enseguida...

Otro carajo.

Instintivamente, nuestras cabezas se iban hacia las ventanillas abiertas, buscando el oxígeno que nuestro cuerpo necesitaba y que aquel pedo con entidad propia nos negaba porque quería el control del coche. Los ojos nos lloraban al atravesar el gélido viento en medio de la nevada, la nariz nos repudiaba y prometía sacrificar el sentido del olfato para siempre, y yo intentaba por todos los medios no mirar a mi amigo, cuya mirada asesina no veía, pero sentía.

Nos cruzamos con un coche de la guardia civil, cuyos ocupantes podrán contar a sus hijos cómo vieron a dos locos conduciendo un coche a -1ºC, nevando, con la cabeza asomada por la ventanilla.

Al cabo de un rato vimos que faltaban 9 km y supimos que nos teníamos que rendir. El pedo había ganado. El coche era suyo. Se iría cuando él quisiera y no antes.

Así que paramos el coche, abrimos las puertas y le pedimos por favor que saliera.

Se hizo el remolón. Se negaba a irse.

Yo intentaba entrar en calor dando pataditas en el suelo mientras observaba mi camisa, cada vez mas blanca y acartonada por la nieve, e intentaba mantener el coche entre Javi y yo, en un desesperado intento por escapar de su ira.

Javi, yo...

Cállate.

Pero Javi, escucha...

Cállate.

Y lo hice, porque su mirada no era precisamente la de un amigo comprensivo, sino más bien la de un asesino psicópata.

Cuando Javi comenzaba a estar todo blanco y parecerse sospechosamente a un Papá Noel albino, sin gorrito, el pedo se fue. Y lo hizo como vino, a hurtadillas, sin avisar. Simplemente me asomé y ya no estaba. Éramos libres de nuevo.

Entramos en el coche como alma que lleva el diablo y tardamos mas de 20 minutos en entrar en calor y poder conducir porque los tiritones impedían incluso meter las marchas.

Migue.

¿ Qué ?.

Vuelve a hacerme esto y te juro que te arranco los huevos.

Su fría voz y su ira, apenas contenida, obraron el milagro de cerrar mi ojo del culo, y me limité a asentir en silencio y cumplir su recomendación... en ese viaje.

Porque volví a hacerlo de nuevo.

Pero esa es otra historia.

Besos a tod@s



viernes, 16 de enero de 2009

EL DIOS EGIPCIO MIN

Hola, amigos:

Hoy hablaremos de dioses, pero no de los conocidos, que líbreme precisamente Dios de entrar en discusiones teológicas. En el caso de los dioses menores, su mito se fundamenta casi siempre en una historia real que con el paso del tiempo convierte su origen y su protagonista en divino. Para no hacer muy largo el post sólo vamos a ver la version que tiene visos de ser lo que pasó en realidad.

El Dios Min:

Se trata de un dios egipcio asociado a la fertilidad masculina, el que permite que las mujeres se queden embarazadas. Con el paso del tiempo, sus atributos los terminó asumiendo Amón y desapareció del culto. Aquí tenemos la representación más común:

Podemos ver que es un hombre con un solo brazo, una sola pierna y un pene más que respetable en posición de firmes. En su cabeza no hay ningún disco solar, lo que normalmente quiere decir que no nació dios, sino que se divinizó después. La historia viene a ser esta:

El faraón tenía que hacer frente a un poderoso enemigo y reclutó un enorme ejército. Tanto que solo quedaron en la ciudad los más ancianos, los niños y un hombre al que le faltaba el brazo izquierdo y no podía sostener el escudo ni las riendas de un carro.

La campaña comenzó a alargarse y lo que iba a ser una batalla se convirtió en una contienda de mas de un año, resuelta felizmente por los egipcios. Se celebra la victoria, se reparte el botín y no se ve la hora de volver al hogar para echar un buen polvete, que la espera ha sido larga.

Al volver a casa, además del polvete se encontraron con que la mayoría de las mujeres estaban embarazadas o acababan de dar a luz. Aunque la mayoría de los egipcios no sabía leer y escribir sí que sabían contar: Un embarazo dura 9 meses, yo he estado fuera más de 12 y el único tipo en edad de procrear es el manco... Estaba claro que nuestro amigo no podía combatir, pero en la cama se defendía perfectamente hasta el punto de abastecer a las mujeres él solito. Los cornudos proclamaron su ira y pidieron al faraón que lo castigase de la forma usual: cortarle un brazo y luego matarlo.

Pero nuestro amigo demostró saber usar la cabeza de arriba tan bien como la de abajo, y se defendió argumentando que Ra le había hablado.

Según el artista, le había dicho que la guerra sería larga y morirían muchos hombres, así que debía procrear hasta la extenuación para asegurar las siguientes generaciones de egipcios. El no quería, pero a Ra hay que obedecerle. Por eso no se le podía matar. Y como ya tenía un brazo menos, no procedía cortarle el sano, porque en la práctica equivalía a morir al no poder valerse por si mismo para comer.

Ante semejante argumento divino poco se podía hacer, aunque el faraón estaba resuelto a no dejar sin escarmiento a nuestro amigo. Como señal de obediencia a Ra, decidió no darle muerte y le dejaría su brazo para que pudiera alimentarse, pero para aplicar un castigo adecuado a su falta le cortaría una pierna.

El hombre protestó diciendo que en los dibujos y escritos relativos a la pena siempre aparecía el reo con sus dos piernas, a lo que el faraón le contestó con deliciosa ironía: dado el tamaño, fortaleza y resistencia de su miembro viril, el pene bien podía pasar por una segunda pierna. Y se cumplió la sentencia.

Este dios se convirtió en el patrón de los caravaneros y los mineros, dos de los oficios donde se debía ser mas hombre por su peligrosidad. Se le asoció la lechuga como planta sagrada, que en el antiguo Egipto tenía fama de afrodisíaca y al cortarla soltaba un liquidillo blanco lechoso, algo espeso, similar en apariencia al semen.

Besos a tod@s




miércoles, 14 de enero de 2009

TRES HISTORIAS

Hola, amigos:

Hoy vamos con unas historias políticamente incorrectas. La primera de ellas es una anécdota cierta, totalmente cierta, aunque la he oido contar como chiste en alguna ocasión. Vamos:

El mafioso Rafaelle Spinello tenía un contable. Un día, éste sufrió un accidente de tráfico, resultando gravemente herido. Mientras se recuperaba, el mafioso descubrió que su contable había desviado 10 millones de euros. Fué a verlo al hospital, y allí le comunicaron que no volvería a hablar, porque le habían practicado una traqueotomía de urgencia que le había afectado a las cuerdas vocales.

Impaciente por saber lo que había pasado con el dinero, Spinello recordó que su contable tenía un hijo sordomudo, por lo que conocía el lenguaje de signos, así que fué con su abogada, que también lo hablaba.

Pregúntele donde están los 10 millones.

La abogada, usando el lenguaje de las señales, le hizo llegar la pregunta al Contable, que a su vez respondió con señales:

No sé de qué me habla.

Dice que no sabe de qué le hablamos.

El mafioso sacó una pistola y apuntó a la cabeza del contable:

Pregúntele de nuevo.

La abogada, por señales, le dijo:

Habla, te va a matar si no le cuentas donde está el dinero.

El Contable, visiblemente nervioso, respondió con señales:

De acuerdo, el dinero está en una maleta de cuero, enterrada en el jardín de la casa de mi primo Enzo, en el Nº 400 de la calle 26, bloque 6 del barrio de Santa Marta.

El mafioso le preguntó a la Abogada.

¿Qué ha dicho?

Dice que no tiene miedo a la muerte y que a usted le faltan huevos para apretar el gatillo.

Pero el plan de la abogada tenía un fallo. El contable estaba mudo, pero no sordo, y comenzó a hacer gestos y señales desesperadas indicando a Spinello que no era eso lo que habia dicho. La abogada se puso nerviosa, y el mafioso supo que algo no andaba bien. Al final, el contable logró escribir lo que había pasado en un trozo de revista.

La abogada apareció muerta en el canal.

El contable apareció muerto en el canal tras recibir el alta.

La historia la contó el propio Spinelli a la fiscalía italiana después de entregarse como arrepentido para reducir su condena a cambio de denunciar al resto de mafiosos.

Esta otra historia tiene toda la pinta de ser una leyenda urbana, pero me encanta:

El profesor estaba hablando de los altos niveles de glucosa que se encuentran en el semen. Una alumna levantó la mano y dijo:

- Si le he entendido bien, está usted diciendo que hay un montón de glucosa como el azúcar en el semen masculino.

- Es correcto, respondió el profesor.

- Entonces, ¿por qué no sabe dulce?...

Tras un segundo de silencio, la clase completa estalló en risas. La pobre chica se puso como un tomate cuando cuando cayó en la cuenta de lo que había dicho sin querer, recogió sus libros sin decir una palabra y se levantó para irse de la clase.

Pero mientras cruzaba la puerta, la respuesta del profesor fue clásica. Totalmente serio, respondió a su pregunta:

- No le sabe dulce porque las papilas gustativas para el dulzor están en la punta de la lengua y no en el fondo de la garganta.

Y esta última historia habla del honor y el valor:

Napoleón Bonaparte siempre usaba una camisa de color rojo en las grandes batallas.

Para él era un detalle importante. Si resultaba herido, con su camisa roja no se notaría su sangre, los soldados no se preocuparían y no dejarían de luchar.

Toda una prueba de honor y valor.

Doscientos años mas tarde, en las grandes ocasiones políticas, Mariano Rajoy utiliza siempre un pantalón marrón...

Besos a tod@s


lunes, 12 de enero de 2009

EL NOBEL DE IDA Y VUELTA

Hola, amigos:

Hoy vamos a volver al tema de la guerra fría, como en el post de "El hombre que salvó al mundo". En esa época, cualquier cosa era objeto de propaganda política: el deporte, las ciencias, la conquista del espacio... todo era susceptible de formar parte de una guerra sin balas pero también sin piedad. Y una de las batallas más curiosas se desató en torno al premio Nobel de literatura y metiendo de refilón a España dentro del embrollo. Vamos con ello.

En 1955 estábamos en la España de Franco, absolutamente anticomunista, que acababa de firmar un acuerdo con EEUU para que se pudieran usar bases aéreas en territorio español. Una firma que encendió al bloque soviético, que ya veía bases de misiles por toda la península apuntando a Moscú.

En medio de todo esto, en 1956 se celebraba la nueva edición de los Premios Nobel. Venían calentitos porque los últimos ganadores eran Ernest Hemingway, americano simpatizante comunista, y Laxness, islandés abiertamente comunista. Y el gran favorito para este año era Boris Pasternak, autor de "Doctor Zhivago"... y ruso.

El jurado recibió unas presiones enormes por parte de los americanos para que el ganador no fuese Pasternak, intentando que no se repitiera una nueva victoria propagandística del bloque soviético. En medio del tira y afloja se acordó que ese año, 1956, ganara un autor del bloque estadounidense, y el siguiente año, en 1957, se le diera el premio al autor ruso. El afortunado ganador resultó ser Juan Ramón Jiménez, de la España de Franco, nuevo socio de EEUU.

Pero llega 1957 y hay un problema.

Hoy día conocemos a Pasternak sobre todo por "Doctor Zhivago", pero a principios de 1957 ese libro era un absoluto desconocido en Occidente por una razón tremendamente importante: el protagonista, el doctor Zhivago, es un intelectual cuya sinceridad, convicciones religiosas e independencia de espíritu chocan de frente con la teoría y la práctica del régimen soviético, así que el sistema había impedido la publicación de la obra, consiguiendo que nadie fuera de la URSS supiera de su existencia. En el bloque del Oeste, Pasternak solamente era conocido por sus poemas, y solo entre la élite literaria. Los soviéticos lo sabían y se cuidaron de que siguiera siendo así porque les interesaba que se llevara el Nobel. Esto es lo único que salvó al autor de acabar con sus huesos en un gulag.

Pasternak tenía un amigo llamado Isaiah Berlin, un comunista de nacionalidad italiana, y en ese año, 1957, le confió un manuscrito de "Doctor Zhivago" con la esperanza de que lo publicase en Italia. Lo hizo y se convirtió en un éxito absoluto de ventas en todo el mundo. En ese momento, los soviéticos presionaron para que un autor crítico con el sistema no fuese Nobel, y los americanos para que sí lo fuese. Al revés que el año anterior y con el mismo protagonista: Pasternak. Al final, los rusos consiguieron evitar el premio usando un resquicio legal: la novela no había sido publicada en la URSS, sin decir que la habían prohibido ellos, claro, aunque flotaba en el ambiente. El jurado, hasta las pelotas de tanta historia, le dió el Nobel de 1957 a Albert Camus, un francés anarquista, ni comunista ni capitalista.

Y para 1958, la CIA prepara un golpe de propaganda tremendo. En secreto, falsifica el papel que usaban los rusos, las litografías, los logotipos... todo lo necesario para fabricar un ejemplar de "Doctor Zhivago" que pasara por haber sido impreso en la URSS, y que se encargó de distribuir discretamente entre el jurado del Nobel, junto a la sugerencia de castigar a los soviéticos por haberles engañado diciendo que no había sido publicado en su país.

El jurado picó y el Nobel de Literatura de 1958 fué, por supuesto, Boris Pasternak. El autor envió una carta en la que se mostraba sorprendido y agradecido por el premio. Una semana más tarde envía otra, en la que se nota la mano del sistema, que dice:

Considerando el significado que este premio ha tomado en la sociedad a la que pertenezco, debo rechazar este premio inmerecido que se me ha concedido. Por favor, no tomen esto a mal.

Fue denunciado como traidor por varios grupos comunistas soviéticos, tras lo cual anunció públicamente su voluntad de no partir al exilio. Nada se sabe desde entonces de lo que le ocurrió a Pasternak, pero podemos imaginar que le hicieron la vida imposible cuando vemos que falleció el 30 de Mayo de 1960, menos de dos años después de haber ganado el premio.

En 1958, el caricaturista Bill Mauldin ganó el Premio Pulitzer por la caricatura que muestra a un supuesto Pasternak haciendo trabajo forzado en Siberia y diciéndole a otro prisionero: "Yo gané un Premio Nobel, ¿Cuál es tu crimen?"

La novela tuvo que esperar hasta 1988 para ser publicada en la URSS y en 1989 el hijo de Boris Pasternak, Evgeny, fué autorizado a recoger el Nobel en nombre de su padre.

Besos a tod@s.


viernes, 9 de enero de 2009

LA FABULA DE LA NINFA

Hola, amigos:

El dia de Reyes estuve en Villaverde con unos amigos. Cenamos en un sitio donde comimos como emperadores y pagamos como campesinos, de lo bueno que estaba todo y lo barato que nos salió. Y en la sobremesa me acordé de esta fábula que ahora cuento para los que no la sabeis.

Érase una vez un país donde la magia coexistía con los seres humanos y una granja donde vivía un hombre con su mujer y sus tres hijos. Un día, la campesina se levantó de madrugada y al mirar por la ventana vió que la única vaca de la familia estaba muerta en el prado.

Era un desastre. ¿De dónde iban a sacar leche ahora? Era su única fuente de ingresos. La situación era tan desesperada que, sin pensárselo dos veces, se ahorcó.

El campesino se despertó poco después, vió a su esposa ahorcada y a la vaca muerta en el prado. Ante lo desesperado de la situación, decidió que no quería seguir viviendo y se pegó un tiro en la cabeza.

Entonces se levantó el hijo mayor, que vió que estaban muertos sus padres y la vaca, y decidió que no quería vivir mas, así que se fué al río pensando en tirarse al agua para ahogarse.

Pero en la orilla había una ninfa que le dijo:

¡Hola!, sé cual es la razón de tu angustia, y te voy a proponer un trato. Si me haces el amor cinco veces seguidas, usaré mi magia para que la vaca y tus padres vuelvan a la vida. Pero si no consigues amarme cinco veces, te tiraré al rio para que te ahogues, como era tu intención.

El chico procedió a hacerle el amor a la ninfa una vez, dos veces, tres veces, cuatro veces... y la quinta no fué capaz de completarla, así que la ninfa cumplió con su palabra y le tiró al río, donde se ahogó.

Entonces se despertó el segundo hijo, que vió a sus padres y la vaca muertos y se fue al río a suicidarse, pero vió a la ninfa, que le dijo que resucitaría a sus padres, a su hermano y a la vaca, si le hacía el amor diez veces; y si no, le tiraría al rio, dónde se ahogaría como eran sus planes. El chico accedió, pero al noveno intento tuvo que darse por vencido, así que la ninfa lo tiró al agua y murió ahogado.

Finalmente se levantó el hijo mas pequeño, que vió a sus padres y la vaca muertos, y que sus hermanos mayores habían desaparecido. Como no había nadie que pudiese cuidar de él, se fué al río a suicidarse. Y entonces vió a la ninfa, que le dijo:

He visto todo lo que ha ocurrido, y lo puedo arreglar todo gracias a mi magia; pero tendrás que hacerme el amor veinte veces, o te tiraré al rio para que te ahogues, como tenías planeado.

El chico contesta:

- Ya, ya... los seres mágicos habláis demasiado. ¿Quién me garantiza que no me pasa como con la vaca? Me prometió ayer un saco de oro por echarle 50 polvos y al que hizo 46 se murió...

Besos a tod@s

martes, 6 de enero de 2009

LOS OSCAR

Hola, amigos:

Buscando información para el post de "El Padrino" encontré varias cosas curiosas acerca de los Oscar. Algunas eran muy conocidas, pero otras tenían su miga y quiero compartir con vosotros estas anécdotas. vamos allá.

Para empezar vamos con los Oscar que tienen que ver con los españoles. Aquí tenemos varias sorpresas.

El primer español en conseguir un Oscar fue Juan de la Cierva, en 1969. Era sobrino del inventor del autogiro. Lo obtuvo por su labor investigadora en el diseño y desarrollo de un compensador óptico de imágenes llamado dynalensk, que compensaba el movimiento de la cámara eliminando vibraciones y desenfoques. Flipad.

El primer español en lograr dos Oscar no es Almodóvar, sino Gil Parrondo, en 1970 y 1971, como director artístico de las películas "Patton" y "Nicolás y Alejandra".

La primera película española en conseguir un Oscar es "Volver a empezar", de José Luis Garci, pero el primer director español en lograrlo es Luis Buñuel en 1972 por la película "El discreto encanto de la burguesía". Y la peli no es española, sino francesa, porque Buñuel se declaró republicano cuando estalló la Guerra Civil Española y estuvo toda su vida exiliado, desarrollando su carrera en Francia y México.

Ahora con los Oscar en general:

En 1985, Steven Spielberg era considerado el rey de las taquillas por "Tiburón", "Encuentros en la Tercera Fase", "E.T." y las dos primeras partes de "Indiana Jones". Ahora quería un Oscar, y presentó "El color púrpura", que obtuvo 11 nominaciones y ni una sola estatuilla. Era el precio de unas declaraciones que hizo años antes acerca de que los que más sabían de cine eran los espectadores, no los académicos.

Algo de razón tenía si echamos un vistazo a los siguientes premios, una selección de las cositas de Hollywood:

1942.- Oscar a la mejor película: "Qué verde era mi valle" (posiblemente el primer título gay de la historia del cine), dejando sin premio a "Ciudadano Kane", luego considerada la mejor película de la historia americana (9 nominaciones... 1 Oscar).

1943.- Los grandes favoritos son nada menos que Humphrey Bogart por "Casablanca" (tercera mejor película de la historia del cine) y Gary Cooper por "Por quién doblan las campanas". Gana un tal Paul Lukas por el pestiño "Alarma en el Rhin", una película de guerra de las del montón.

1974.- Tenemos a Al Pacino por "El Padrino II" y Jack Nicholson por "Chinatown". Gana el inefable y desconocido Art Carney por "Harry & Tonto", que cuenta la insulsa historia de un jubilado y su gato paseando. No sé cuál de los dos es Harry y cual es Tonto.

1993.- Gana el inexpresivo Tommy Lee Jones por "El fugitivo", y se queda sin premio Ralph Fiennes, el comandante nazi de Auschwitz en "La lista de Schindler".

1997.- Gana "El paciente Inglés", aunque los pacientes éramos los que nos tragamos este horror sin prenderle fuego al cine, en vez de "Fargo" o "Jerry Maguire". Sin palabras.

Y la cagada más espectacular la he dejado para el final.

1976.- Tenemos nominada a la mejor película a "Taxi Driver", ese Robert de Niro haciendo de taxista loco y "Todos los hombres del presidente", con Dustin Hoffman y Robert Redford acosando a Nixon en el escándalo Watergate. Y gana "Rocky", con Sylvester Stallone. Pa matarlos.

El resultado de las votaciones no siempre ha sido secreto. Al principio, los ganadores se daban a conocer previamente para que la prensa pudiera incluirlos esa misma noche en su última edición. En 1940, un periódico se adelantó y los anunció por la tarde, con lo que los invitados conocieron los resultados antes del banquete. Entonces se pasó al voto secreto.

Katherine Hepburn es la actriz más reconocida en los Oscar, con 12 nominaciones y 4 premios. Sin embargo, sólo acudió a la gala una vez, y no para recoger una estatuilla: en 1974 subió al escenario para entregar un premio honorífico al productor Lawrence Weingarten.

La cantante Björk estuvo nominada al Oscar a la mejor canción original por "Bailando en la oscuridad", y actuó en la ceremonia del 2001. Acudió a la gala con un curioso vestido en forma de cisne, y en su paso por la alfombra roja se lo levantó y "puso" un huevo.

Cowboy de medianoche
(1969) es la única película que ha ganado un Oscar pese a estar clasificada como X en Estados Unidos por su famosa escena de la pajilla en la prisión turca, aunque esa clasificación cambió a raíz del premio.

Stanley Kubrick
recibió 13 nominaciones: cuatro de ellas fueron al mejor director y otras cinco al mejor guión. Pero el único Oscar que se llevó fue por los efectos especiales de "2001: Una odisea del espacio" (1968). Tuvo suerte porque gente como Cary Grant o Alfred Hitchcock no lograron ninguno.

En 1974, un espontáneo exhibicionista se lanzó al escenario de la gala en pelotas, llevando un signo de la paz. El presentador, David Niven, salió del apuro diciendo que lo único que había logrado el hombre era "mostrarnos sus pequeñeces".

A Walt Disney le dieron un Oscar con un diseño especial en 1939: una estatuilla de tamaño real y siete miniaturas que simbolizaban su premio honorífico por Blancanieves y los siete enanitos, en reconocimiento a la innovación que esta película de animación supuso para la gran pantalla.

En 1996, Steven Spielberg compró de forma anónima el único Oscar que ganó el actor Clark Gable por su trabajo en "Sucedió una noche". Lo hizo para evitar que perdiera su valor simbólico y pasara a ser objeto de explotación comercial. Más tarde lo cedió a la Academia, alegando que no había un santuario mejor para la estatuilla.

En 1933, cuando Will Rogers anunció al ganador dijo: "Mi buen amigo Frank ". En ese momento Frank Capra, uno de los nominados, se levantó para recoger el premio. Sin embargo, el ganador real era Frank Lloyd y cuando Rogers aclaró el malentendido, Capra se rebotó y se marchó de la ceremonia. Nunca volvió a dirigirle la palabra a Will Rogers.

En 2001, para que la gala no se alargase -la anterior duró más de cuatro horas- la Academia anunció que premiaría al discurso más breve con un equipo de televisión. Julia Roberts recogió un Oscar ese año y cuando estaba en el escenario dijo: "Qué demonios, yo ya tengo tele, y como no sé si voy a volver a estar aquí arriba en toda mi vida, me voy a tomar el tiempo que necesite para agradecer el premio a quien quiera".

Entre 1942 y 1944, los Oscar se fabricaron con una base de yeso en lugar de bronce, debido a que los metales se empleaban en exclusiva para la II Guerra Mundial.

Besos a tod@s

viernes, 2 de enero de 2009

EL HOMBRE QUE SALVO AL MUNDO

Hola, amigos:

Hoy vamos a contar una historia de un hombre que salvó a la humanidad. Y no hablamos de Spiderman o James Bond, sino de un hombre que aplicó el sentido común, el menos común de todos los sentidos. A ver qué os parece.

26 de Septiembre de 1983. A las 00.14 el teniente coronel Stanislav Petrov se encontraba de guardia en el centro de inteligencia militar. Le gustaba el trabajo nocturno porque no había comisarios políticos, jefes, ni personal de un lado para otro. Las últimas semanas habían sido muy agitadas. La Unión Soviética había derribado un avión de pasajeros coreano que había invadido su espacio aéreo, matando a 269 personas incluidos varios estadounidenses y la OTAN había decidido hacer unas prácticas con urgencia, que el KGB interpretó como preparativos de guerra, así que la calma nocturna era bienvenida.

Pero aquella noche comenzó mal, porque las alarmas comienzaron a sonar.

Se activa un protocolo de seguridad que Petrov tiene que mirar dos veces para asegurarse de que no está soñando: los ordenadores han detectado el lanzamiento de un misil nuclear desde Estados Unidos.

A ver, no pasa nada, puede ser un misil de prueba. Veamos su trayectoria probable...

Moscú.

Vaya. Repitamos el cálculo...

Moscú.

El protocolo de actuación era muy claro al respecto: ordenaba que el máximo responsable de la inteligencia militar rusa, en aquel momento Petrov, informase urgentemente al presidente Chernenko para que éste activase el protocolo de respuesta.

Pero antes, Petrov tomó aire e intentó tranquilizarse.

Es un sólo misil, los ordenadores son idiotas, pueden equivocarse, y desde luego, con el arsenal armamentístico de Estados Unidos, no van a empezar la guerra con un solo misil.

En ese momento, el ordenador avisa del lanzamiento de una nueva cabeza nuclear.

Petrov volvió a tomar aire.

Siguen siendo 2 misiles, con eso no se empieza la guerra que va a devastar el planeta...

Pero se detecta otro.

Y otro.

Y otro.

Cinco misiles venían hacia la URSS e impactarían en menos de 20 minutos.

A pesar de todo, Petrov se resistió a llamar al presidente Chernenko. Conocía bien las peculiaridades del sistema satélite OKO de alerta temprana rusa; sabía que, en la situación de tensión que se vivía entre las dos potencias, la respuesta de su presidente sería que lanzaran todo su arsenal nuclear contra Estados Unidos y estaba convencido de que cinco eran pocas cabezas nucleares para ser un ataque.

Según los ordenadores, en apenas diez minutos el primer misil impactaría en Moscú. Según Petrov, eso tenía que ser un error.

Y tenía razón. Tras una corrección de rumbo, los rayos del sol habían impactado directamente contra el satélite, cegando la lente y provocando un error de lectura de los ordenadores interpretando unas nubes como si fuesen misiles intercontinentales nucleares. Cuando los propios ordenadores confirmaron la falsa alarma, Petrov informó a su superior. Este, aliviado, le dijo que sería homenajeado por evitar la catástrofe.

Pero había un problema: por un lado había evitado un desastre a base de sentido común, pero en materia de disciplina militar consideraron que el teniente coronel Petrov se equivocó en su decisión, ya que su deber era comunicar el dato a sus superiores, y dejar que ellos decidieran si era erróneo o no.

Dadas las circunstancias no lo castigaron, pero lo reasignaron a un puesto inferior y decidieron ocultar el incidente. De darse a conocer hubiera supuesto la cabeza de unas cuantas importantes autoridades porque los equipos informáticos no eran tan buenos como le habían hecho creer al Kremlim. En la actualidad, Petrov se encuentra retirado del ejército y vive en Fryazino, Rusia.

Hoy en día, tras la desclasificación del incidente, a Stanislav Petrov se le conoce mucho más fuera que dentro de Rusia. Aunque él mismo no se considera un héroe por lo que hizo ese día, la "Association of World Citizens" (Asociación de Ciudadanos del Mundo) le otorgó su premio "World Citizen Award" el 21 de mayo de 2004 por evitar lo que podría haber sido un desastre mundial. En enero de 2006, Petrov realizó un viaje a EE.UU., donde fue homenajeado por las Naciones Unidas, y donde posteriormente le fue entregado un segundo premio de la Asociación de Ciudadanos del Mundo.

Este hombre salvó mi vida, la vuestra, y la de todo el planeta.

Él, sin embargo, sereno, replica cuando le hacen una entrevista que sólo hizo su trabajo.

Besos a tod@s